Intro: Mr. DT' is an essay analysis of a very “powerful” and very simple person. Everything for him is black and white, good or bad, beautiful or ugly, hot or cold. But most of all he is a very arrogant, cocky and offensive man who has totally broken the political apparatus of the USA.
There is no longer moderate centrism only left and right, and sometimes ultra left and ultra right. The essay is written in Spanish but English-speaking readers are provided with a link to Google Translate that is very faithful to human translation.
El Señor DT’ es un análisis simple de una persona muy poderosa y muy simple. Todo para él es blanco y negro, bien o mal, bonito o feo, caliente o frio. Pero más que nada es un hombre muy arrogante, engreído y ofensivo que ha roto totalmente el aparato político de los EEUU.
Ya no hay centrismo moderado solo izquierdas y derechas y algunas veces ultra izquierdas y ultraderechas. El ensayo está escrito en español pero a los lectores de habla inglesa se le proporciona un enlace a Google Translate que es muy fiel a la traducción humana.
Fue un suceso inesperado ‘out of the left field’ como dicen los gringos el señor DT’ anuncia su decisión para lanzar su candidatura para la presidencia de los Estados Unidos de América. En ese mismo momento decide flagelar a los inmigrantes legales e ilegales pero especialmente a los provenientes de México. Acusándolos de ser unos criminales, ladrones y violadores. Algo muy sorprendente tomando en cuenta que los EEUU aun bajo los republicanos siempre han tratado de guardar las apariencias de cordialidad, aun cuando existieran problemas entre estos vecinos.
¿Por qué este magnate de los bienes raíces y la TV decide romper con una tradición de muchos años así de repente?
Al día siguiente de esas horribles declaraciones todos pensamos, que no iba a llegar muy lejos, pero algo estaba pasando por que él seguía avanzando. Algún segmento de la población estaba siendo olvidado o se sentía víctima, o algo peor, porque ni nosotros, ni los medios lo vieron llegar. Y es que a pesar de que Obama había mantenido una economía estable y con baja inflación, los estadounidenses lo ignoraron y pusieron atención a las palabras de un demagogo facistoide y amante del drama y el auto-elogio.
Como un tipo sin un solo día de experiencia en la política sale de repente y vomita barbaridades y una que otra verdad a medias, pero más importante aún, fue el tono que usó en sus discursos. Provocador, ofensivo y muy mordaz, atacó a la prensa porque le reprendió por su tono y sus mentiras llamándoles la “fake news” (noticias falsas}.
¿Por qué los estadounidenses de la costa este y medio oeste estaban tan disgustados con el status quo demócrata? No es fácil identificar cual es la principal causa por que son muchas. Por ejemplo el Señor DT’ señala que los criminales ilegales en las cárceles de Texas, Arizona y California le cuestan al estado millones de dólares al año, (pero ignora cuantas fortunas se han creado a espaldas de la mano semi-esclava de los indocumentados agrícolas), o los inmigrantes musulmanes con familias extendidas viviendo de ayuda federal y/o estatal o la ayuda médica (Medicad) para los pobres o viejos se agregan a esos gastos.
Todo eso, mas el hecho de que la base que apoya al señor DT’ pertenece a la denominación protestante llamados evangélicos y ellos no comulgan con las ideas progresistas liberales de los demócratas de reconocer un sinfín de variedades sexuales alternas y exóticas la llamada coalición LGTB o sea lesbianas, gay, (homosexuales), transexuales, Queer, neutros, asexuales(que aun todavía no entiendo como funciona eso), y bisexuales.
(Los siguientes párrafos son tomados en parte de la revista Rolling Stones en un articulo publicado en el año 2016 durante su campaña)
El Comienzo
Lo primero que se notaba en algunas de las asambleas del Señor Donald T, durante la campaña presidencial era la confianza y la seguridad. Algunos psicólogos ingenuos lo quieren pintar como un tipo inseguro de sí mismo, pero en persona esa noción desaparece.
¿Donald Trump inseguro? ¿A poco no todos tenemos ciertos problemas? En el Verizon Giant Center en Manchester la noche antes de las primarias de New Hampshire, Trump se dirige hacia el escenario donde una multitud estridente aplaude al compás de las notas de “Revolution” de los Beatles, irónicamente la canción es una historia advirtiendo sobre los peligros de los falsos profetas vendiendo revoluciones al vapor, pero Trump flota en su rutina con esa música, aunque no necesariamente sea lo que ande predicando, pero cuando se gana como él ganó en las primarias a quien le importa el significado de esas canciones. Entonces él se para en la tarima atrás del atril y hace su rutina estilo Mussolini, la cual ha perfeccionado en los últimos meses. Es un saludito como de reina de belleza acompañado de una sonrisa burlona y un aplauso muy fingido en dirección de la audiencia y su cara todo el tiempo muestra una satisfacción ególatra. -Esto es increíble, dice, mientras una multitud delirante de cerca de 4,000 personas residentes de Nueva Inglaterra abrigados como osos polares pues hay una tormenta de nieve afuera y los automóviles derrapan, pero aquí adentro está atascado de gente, y Donald siempre anda mostrando su pulgar hacia arriba como un gesto de aprobación, mientras se jacta de que su foto apareció en la revista Times diciendo; -han publicado mi foto de espalda pero yo he sido extremadamente cuidadoso con mi cabello. A él le gusta presumir su melena rubia y sedosa, que a su parecer se ve hermosa.
El es un show de variedades ridículas, lo sabe y aun así empuja por más exageraciones. De repente se fija en un imitador y le grita, -espero que estés haciendo mucho dinero, y agrega,
¿-Melania te casarías con él? La entonces futura primera dama es una ex-modelo eslovaca que aparte de ser famosa por ser la esposa de Trump lo único que se puede decir que ha hecho en EEUU para ser conocida, es un comercial de TV para la compañía de seguros AFLAC en la que aparece como una versión femenina de Frankestain siendo resucitada.
Ella solamente tuvo que recitar solo una línea en el comercial, y en New Hampshire ella solo dijo, -nosotros los amamos. Con un fuerte acento vampírico agregando, -juntos vamos a hacer América grande de nuevo. Mientras tanto este drama patriótico reaccionario continúa, la escena es bizarra.
Melania Knauss apenas llego a América en 1996, cuando tenía 26 años, pero la multitud se vuelve loca de todos modos, todo lo que Trump hace le funciona en estos días. –Ella es hermosa, pero aun más hermosa por dentro, dice Trump alzando un dedo hacia el cielo y agregando, -además inteligente.
Antes del discurso el anunciador dijo que no maltratarían a los que protesten, pero que los rodearan y les griten Trump, Trump, Trump hasta que lleguen los de seguridad para que los saquen sin piedad. Hemos visto este ritual antes y la multitud lo pide a gritos. En otro evento una persona estaba tratando de imitar al comediante John Oliver, y se rasgó su camisa en medio del discurso de Trump y en su pecho decía, “eminent domain this.” (*En español es el derecho que tiene el gobierno para expropiar propiedad privad para uso público). Entonces el mismo sujeto gritó, -Trump es un racista, fue inmediatamente rodeado por una turba de simpatizantes del candidato gritando, Trump, Trump, Trump. Entonces seguridad llegó y lo arrastró hasta la puerta ante la algarabía de los presentes.
Las presentaciones de Trump son como un episodio de Jerry Springer donde aun los perdedores parecen ser o son parte del Show.
Esa misma noche los pocos que se atrevieron a protestar fueron inmediatamente callados por una multitud delirante e hipnotizada por su semidiós, era una escena como sacada de una película de locos poseídos. Poco después una mujer grita que Ted Cruz es una pussy (vagina) y que las bolas (testículos) de Trump son unas sandias, en cambio las de sus oponentes son como pasas.
En menos de un año Trump se las arregló para convertir los EEUU en una preparatoria del valle de del Rio Grande (llena de machismo toxico). El sistema electoral americano se abrió ante él como una gigantesca flor por no decir otra cosa, desde la tarima Trump puede ver su futuro. Los expertos no lo quieren reconocer pero él está ahí pensando todos sus movimientos por adelantado como ajedrecista. Salvo un milagro de la oposición este individuo que juega con el ridículo y el insulto será el próximo presidente de los EEUU. Monosilábico, tirano enviciado en la TV y los videojuegos se está apuntalando para penetrar el más impenetrable y oligárquico sistema electoral en el mundo, y que se transformó en un proceso electoral tan falso y disfuncional que un payaso tétrico se coló.
Unos días antes Trump había enviado unos tweets en los que decía que Jeb Bush necesitaba a su mama, solo porque él había aparecido con su madre, la señora Barbara Bush en un programa de la mañana. Jeb se ofendió y desde entonces no hay buenas relaciones entre ellos, cuando Jeb dijo que su madre era la mujer más fuerte que él conocía, Trump dijo que ella debería ser la candidata. La multitud lo abucheó, pero solo porque esa no era su audiencia, sino que había sido seleccionada por el partido republicano antes de que sucumbieran a su hechizo. En esa ocasión Trump había criticado al hermano de Jeb (George W Bush) y estas eran verdades que ningún republicano se había atrevido a pronunciar, tales como la catastrófica invasión a Irak o los ataques de septiembre 11, (y eso casi me inclina a ceder a su hechizo populista.) Entonces muchas cosas importantes estaban en juego. Con el medio oriente en ruinas, una crisis de refugiados mayor, y al menos tres asientos de la suprema corte estaban por ser remplazados. Era evidente que el partido republicano había escogido puros incompetentes para competir con Trump.
Ni los Bush ni el resto de sus contrincantes tenían la garra ni la fuerza ni la preparación política para derrotar a Trump. Trump se devoró a todos vivos en su jugo y en su juego. Más aun había evidencia de que los encuestadores no estaban contando bien los votos a favor de Trump, pues la gente lo estaba apoyando en números aun más grandes, solo que no lo querían admitir en público, (algo así como cuando le preguntan a una pareja si les gustaba el sexo con asfixia) lo negarían aunque ellos fueran practicantes de eso diariamente porque es peligroso y vergonzoso). Esto lo comprobé con algunos México-americanos que votaron por él, solo para arrepentirse después y no admitirlo.
Muchos se preguntarán, ¿Por qué los medios odian a Trump? Los reporteros liberales y progresistas dirán; que porque es un tipo loco y peligroso al estilo Hitler, los conservadores dirán que no es conservador, las mujeres por su sexismo machista descarado irresponsable. Pero la gota que derramo el vaso fue cuando un reportero del New York Times con una condición neurológica le preguntó acerca de los miles de musulmanes que según Trump celebraban después de los ataques del 11 de septiembre del 2001. Trump le contestó haciendo una imitación de una persona discapacitada en forma de burla, y después el negó que hubiera hecho eso.
Pero la ultra sensibilidad de Trump para con los reporteros no explica totalmente los esfuerzos de los medios por ayudar a sus oponentes. Todos sabemos y hemos experimentado el juego más común en la escuela, que por lo general es criticar a los débiles, tontos, feos y que también incluye atacar a los sabiondos, bien portados, y a los forasteros. Pues ese es el juego de el señor DT’.
Una vez que Jeb Bush que era el favorito del establishment, mostró que no tenía nada excepto el lastre que le había dejado su hermano George W Bush Jr. Los medios del status quo (fake news)como los llamaba Trump trataron de empujar a Marco Rubio porque había obtenido buenos resultados en Iowa, solo para arruinar todo poco después en un debate frente a Chris Christie, donde mostró que solo era un robot siguiendo un libreto de líneas pre seleccionadas.
Para cuando el famoso Súper Tuesday llegó, Trump ya sabía que tenía a la multitud en la bolsa. Pero cuando Trump se presentó en Plymouth State University donde sus enardecidos seguidores eran blancos y de no muy buena condición económica, se encontraron a su chivito de expiatorio en los inmigrantes, y los musulmanes, con dedicatoria especial al vecino del sur, México de donde salen muchas historias de terror.
En comparación a Rubio, Trump es un orador, pero realmente no lo es, es decir al menos no va siguiendo un libreto como el robot Marco Rubio, en vez de eso saca sus quejas de cómo el mundo ha tomado ventaja de los EEUU y de cómo los mexicanos traen crimen, y lo machaca y lo machaca hasta que la multitud enloquece.
El no conoce de palabras elegantes, ni de sentimientos tiernos, él lo que sabe es enloquecer a la multitud con palabras de odio y resentimiento. En este debate en PSU Trump se asegura de poner el dedo sobre la llaga de Rubio y se burla sobre su necesidad de seguir un libreto muy actuado.
Es entonces cuando Trump se dirige a la multitud y muy ufano les dice, -honestamente no uso un libreto ni teleprompter, no tengo discurso, yo solo vengo a hablar con ustedes, luego como por arte de magia cambia a una voz chillona y como merolico de mercado dice, -señoras y señores es un placer estar aquí en New Hampshire por favor voten por mi o ya no les voy a volver a hablar. Después apunta a los representantes de los medios y dice, -ven esas cámaras allá atrás, ellos nunca habían venido hasta acá. Entonces la multitud voltea y los ve con desprecio.
Poco antes Trump se había jactado de cómo esos reporteros habían sido obligados a admitir que él había ganado el debate en San Anselm, -ellos no querían admitirlo pero me han dado muy buenas notas. Es una retorica muy simple porque Trump conoce su audiencia, puede leer sus mentes. El público que adora a Trump ve a los medios como snobs, y esa es una de las razones por las que votaron por él.
Jay Mathews es un nativo de Plymouth con una barba crecida y una pancarta de Trump, dice que una de las razones por las que votará por Trump son sus ataques a la prensa y agrega, -el dice que él es rico y que no necesita del salario de la presidencia solo quiere sacar al país del hoyo en que está metido.
Trump también afirma que tanto demócratas como republicanos aplican políticas regresivas que afectan a la gente ordinaria. Habla por ejemplo de la excepción de las leyes antimonopolio del cual gozan las compañías aseguradoras, que es una atrocidad que data desde 1945 (Mc Carren Ferguson Act). Esta ley que fue patrocinada por uno de los más famosos legisladores de nuestra historia, (el senador por Nevada Pat Mc Carren que se dice fue la inspiración para hacer el personaje de El Padrino III), y que permite a las compañías aseguradoras compartir información y confabularse para repartir los mercados. Ni los republicanos ni los demócratas han hecho ningún esfuerzo serio para anular esta indefensible puerta secreta.
Durante los debates acerca de ACA, (seguro de salud) dice y re-machaca en sus actos de campaña, explicando las cosas desde su perspectiva como empleador. “Las compañías de seguros,” dice Trump, “prefieren tener monopolios en cada estado, que cientos de compañías ofreciendo sus servicios, lo que hace esto difícil para mí porque no puedo obtener buenas ofertas.” El Sr Trump cree que los precios se irían abajo si los derechos de exclusividad de las aseguradoras fueran eliminados, también ha dicho que él está a favor del libre comercio, pero solamente cuando el trato es equitativo.
En ese respecto diversos analistas de la revista conservadora “The Review” han dicho que las palabras de Trump son las de un trepador político sin un plan definido buscando ser un hombre fuerte al estilo de los gorilatos sudamericanos de antaño. Lo que estos trajeados y perfumados “Buklytes” (seguidores del influyente conservador William P. Buckley) no entienden, es que a la gente le vale un cacahuate los principios conservadores, sabemos que por mucho tiempo la gente respondía a esa retorica. Pero no era por el principio en sí, sino porque estaba acoplado a una política de resentimiento. Los liberales, la burocracia, el gobierno, y los inmigrantes son los culpables de todos los problemas. Por generaciones los intelectuales conservadores han culpado al gobierno y a los ecologistas del declive americano. Por último y para acabarla de chingar, como dicen los rancheros, la competencia en el lado demócrata entre Hillary Clinton y Bernie Sanders se puso súper dramática y eso le favoreció a Trump, también expuso profundas grietas en la estrategia democrática que Trump inmediatamente explotó